Despedida de 2º B de bachillerato.
El
final de un ciclo, y el principio de un sueño.
Esto,
irremediablemente, se acaba. Todo tiene un principio y un fin, pero
cuando la meta que queda es el futuro, sin duda, es más agradable
la despedida.
El
bachillerato, no nos engañemos es un coñazo. Siempre pendientes de
las notas, de los exámenes, y buscando la excelencia para llegar a
lo más lejos posible. La sombra de la EvAU es alargada. Pero, seamos
serios, la vida, tal como el sistema social la plantea es una lucha
constante por ser los mejores. Al final, a la salida por esta puerta,
está el futuro, el sueño universitario como
los denominábamos un amigo mío y yo, o el de los ciclos formativos.
Estudiar,
es un derecho, no una obligación. Sin duda, vuestros padres piensan
como yo. Los pobres no tenemos más opción que estudiar,
esforzarnos, no para ser ricos que eso es muy difícil, sino para
realizarnos en la vida y ser lo que queramos, no lo que quieran los
otros.
Decía
el gran Albert Einstein “La
vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por
las que se sientan a ver lo que pasa”.
No os sentéis, luchar por conseguir un ideal. Nos busquéis salidas
fáciles por no haber echado el resto en el envite de la vida. Y
sobre todo, a pesar de ser un camino de dificultades el que os vais a
encontrar, ser felices. Pues aunque yo os haya enseñado el pasado y
he puesto toda la pasión del mundo por explicarlo, la vida es el
presente.
Mañana,
dentro de unos días, cuando la fiesta se acabe, es decir la
graduación, la EvAU, empezareis a tener otra perspectiva del curso.
Para algunos es una liberación, para otros un mal sueño, pero con
que sólo una persona se haya sentido satisfecha del paseo que hemos
dado por la historia yo, personalmente, me sentiré feliz.
El
otro día me escribía un alumno un correo que me gustó. Era
emotivo, pues guardaba buenos recuerdos. También entendía muchas
cosas que no había comprendido hasta entonces. Por eso os digo, ser
listos, buscar un objetivo en la vida que sea racional y que os
satisfaga, y sobre todo, luchad con fuerza para cumplirlo. Si no lo
conseguís que nade os reproche por no haberlo intentado.
Es
seguro que no todos valen para hacer un puente, pues para eso hay que
ser pontonero. Tampoco el dibujo os sacara de ningún apuro, pero que
nunca os diga nadie que sois menos inteligentes que otros, ni que hay
mejor gente que vosotros. Hacer gala de haber estudiado en el IES
“Valle del Ebro”.
Yo
me llevó un buen recuerdo, aunque algunos piensen que los exámenes
eran más fáciles lo de mi grupo. Ya sabéis que opiniones debe
haber para todos los gustos como las ideologías.
Por
último, espero y deseo ver alguno de vosotros triunfando por la
televisión con el artefacto que haya creado, o dirigiendo una
empresa con sus ideas brillantes. Yo me alegraré en el alma por
haber contribuido, mínimamente, a esos triunfos.
Voy
a terminar con una frase que hace cinco años les dije a unos alumnos
que ya han terminado la carrera y que la considero un compendio de la
vida y el saber. Esta frase la dijo Sorcha Carey, profesora de arte
clásico “No
hay que confundir nunca el conocimiento con la sabiduría. El primero
nos sirve para ganarnos la vida; la sabiduría nos ayuda a vivir”.
Tenerla siempre presente, os ayudara. Suerte.
Francisco
Santos Escribano.
